Con su aire vintage, de escaneo de revista de los 70, esta foto abre la entrada de hoy para proponeros una receta muy retro con un toque modernillo encontrada en el número de este verano de Elle Gourmet. Vamos, que hoy nos ponemos hipster para cocinar pecho de res, pero lo llamamos brisket de ternera, que parece que luce un poco más, ¿verdad?
¿Qué vamos a hacer? Una especie de carpaccio mucho más barato que el tradicional, puesto que cambiamos solomillo por pecho. Nos va a dar un poco más de trabajo, pero el resultado va a sorprender a todos los cocinillas del grupo, ya verás.
Ingredientes para preparar brisket de ternera para 4 personas:
- 400 gr. de pecho de ternera
- 1 litro de agua
- 100 gr. de azucar
- 100 gr. de sal
- 30 gr. de café
- 30 gr. de azúcar moreno
- 30 gr. de pimienta
- 30 gr. de comino
- salsa César
- 50 gr. de pepino encurtido
- 50 gr. de rabanitos
- albahaca thalía (o la que vendan en tu tienda más cercana)
- hojas de hinojo
¿Tienes todo (o casi todo)? Pues nos ponemos manos a la obra preparando la carne en salmuera (es decir, en agua con sal y azúcar bien diluidos) y dejándolo así 5 días en la nevera. Seca la carne, pásala por las especias y cocínala a la parrila (si tienes) o en una sartén (si no eres tan afortunado). Una vez sellada, congélala. Sí, has oído bien. Y descongélala el día que vayas a consumirla. Aprovecha ese momento en el que la carne sigue dura pero comienza a ser manejable para cortarla en láminas muy, muy finas, para servirlas después decorada con los encurtidos, la salsa, las hierbas, el aceite de oliva y lascas de sal.